Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de abril, 2024

Limerencia.

Escribí un correo largo sin destinatario. Enterré 2 pulseras. Me voy al mar. Tengo un vacío que no lo llena nada. Sólo necesitaba hablar 8 minutos a la nada. Estúpido estrés.

Autoamor

Y no fué a propósito, es que tenía tanto qué decir, qué preguntar, .... con tanto coraje, que mejor callé y seguí, a medias, sin corazón, sin ganas, sin un refugio, sin poder respirar, sobrepensando todo, seguí .... empecé a caminar sin rumbo y no me he detenido ... no sé a dónde voy es cierto pero también ya no estoy donde siempre me sentaba a esperarte, a adorarte, a imaginar una vida contigo, ... seguiré caminando y sin responder. Necesito respuesta de mí, para mí.

De amarillo a negro.

Quiero soltarle. Dejarlo ir. No pensar en Él ni en lo que pudo ser y NO FUÉ ni será. Quiero soltar la esperanza. Matar la limerencia. No quiero tenerlo en mi sistema. Ya no quiero sufrir por no tenerlo. No quiero extrañar lo. No quiero tener ese dolor en mi pecho, ya no puedo. No quiero volver a buscarlo. No quiero necesitarlo. No quiero recordar su voz. No quiero sufrir por pensar que le gusta alguien más o esta enamorándose de alguien nuevo. No quiero buscar nada relacionado con Él. No quiero tener nunca más esperanzas. No quiero que me falte el aire cuando lo recuerdo. No quiero verlo. No quiero sentir que me muero.

🟡

Hay de días, a días. De pronto algún miércoles o sábado la vida transcurre ligera, divertida, con risas, soluciones, música, reuniones y películas... Están los otros días, los pesados lunes o los viernes fugaces, sacando la vida adelante, planeando el futuro, anotando los miles de pendientes,... sintiendo que casi no dueles... casi. Pero después llega un martes cualquiera, un domingo nostálgico, jueves medio triste, en los que me pregunto donde estarás, con quien hablarás,  como será ahora tu rutina, a quien quieres ahora, si ya te estarás enamorando de alguien más y si te hace reír como yo ...  esos malditos dias extrañando tu voz y tus abrazos, donde me arrepiento de haber borrado tus correos y tus audios y lamento no poder leer nuestras conversaciones a veces tontas, profundas, sexys, donde éramos cómplices, nos confesabamos secretos y deseos además de compartir videos chistosos y románticos de instagram... En todos esos días, en los que dueles y no, hay una avance: he cambiando el

✨️